La central tendrá una capacidad de generación de 240 megavatios y una provisión garantizada de carbón de 1,2 millones de toneladas por año a cargo de la empresa estatal Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT) para su funcionamiento.
La obra, impulsada por el Ministerio de Planificación Federal de la Nación, demandó una inversión de 6.000 millones de pesos y emplea actualmente a 1.500 trabajadores de la región y de otros puntos del país.
La obra, a cargo de la empresa española Isolux Corsán, presenta un alto grado de avance que, según los ejecutivos de la firma, ya alcanza al 90% y permitiría comenzar con las primeras pruebas de generación de energía en diciembre de este año.
El funcionamiento de la usina permitirá además obtener otros subproductos de valor para la industria de la construcción como yeso y cenizas, que son el resultado de la combustión del carbón con otros minerales como la caliza durante el proceso de generación de energía.
La central contiene una gran caldera que alojará al carbón y éste, mediante un proceso químico, emanará vapor a gran presión que hará mover las dos turbinas que posee la planta.
La obra cuenta con la última tecnología a nivel mundial y permitirá inyectar 240 MW al Sistema Interconectado Nacional, lo que posibilitará abastecer de energía eléctrica a 600.000 personas por día, una cantidad equivalente al doble de la población de la provincia de Santa Cruz.
La construcción y posterior puesta en marcha de la usina viene a coronar el proceso de renacionalización de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT) tras su concesión a manos privadas durante la década del `90.
En los cálculos de YCRT, a fin de año la mina habrá acumulado reservas de carbón para dos años de producción energética y se espera que a fines de 2015 se alcancen 4,5 millones de toneladas anuales del mineral.
De acuerdo a las últimas estimaciones de Yacimientos Carboníferos Fiscales (YCF), las reservas comprobadas de carbón en la actual explotación de Río Turbio alcanzan 427 millones de toneladas, cifra que se eleva a 734 millones si se tienen en cuenta las existencias estimadas.
Con dos frentes montados, uno de los cuales ya está en producción, la mina tendrá ahora la función primordial de abastecer a la usina los 365 días del año.
Una vez puesta en marcha, la usina termoeléctrica de Río Turbio representará 1% de la energía total del sistema interconectado nacional y diversificará la producción energética del país.
Según datos brindados por Lisse, la energía producida a partir de carbón representa en la actualidad el 40% de la producción mundial.